sábado, 22 de junio de 2019

(De Pluma Ajena) SAN MARTÍN DOCTRINARIO DE LA POLÍTICA DE ROSAS (por Jordán B.Genta)





























































































































































  




































































jueves, 13 de junio de 2019

Gral. LUCIO N. MANSILLA (1792-1871)


GRAL. LUCIO NORBERTO MANSILLA (1792-1871)
Breve Semblanza de un Militar Heróico- Agrimensor- 
Creador de la Provincia de Corrientes y de la Institución de 'Serenos'

Lucio Norberto Mansilla comenzó su carrera militar prestando servicio durante las invasiones inglesas de 1806 bajo las órdenes de Santiago de Liniers en las jornadas del 10,11 y 12 de agosto, con solo 14 años. También en la Defensa de Buenos Aires y durante el ataque de Whitelocke a Buenos Aires, Mansilla tomó parte en los combates de los Corrales de Miserere, que dieron inicio a la segunda derrota británica en el Plata.
En el año 1809 fue nombrado agrimensor patentado, por el virrey Liniers, previo examen ante peritos. El mismo año con su título de agrimensor, se presentó al Cabildo  y obtuvo el permiso para abrir y regentear una Escuela rudimentaria de matemáticas.
Al producirse la Revolución de mayo de 1810 se sumó a la misma, al respecto dice en sus Memorias: "...al grito de LIBERTAD, ceñí la espada, abandonando el halagüeño porvenir, y la posición social obtenida, y me puse al servicio de mi patria."
En 1812, ya con el grado de teniente, bajo las órdenes del General José Artigas hizo la campaña contra las fuerzas portuguesas que habían invadido ese territorio, y posteriormente liberó a Montevideo de los Realistas españoles bajo órdenes de Rondeau
En las batallas de la Independencia, participó en la organización del Ejército de los Andes, a las órdenes del General José de San Martín, el cual lo nombró "Comandante General de las Cordilleras del Sud de los Andes". Participó en la batalla de Chacabuco y en la de Maipú
Mansilla intervino en la elaboración del Tratado del Pilar, celebrado el 23 de febrero de 1820 entre Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos.
Fue el creador de la autonomía de las provincias de Corrientes y Misiones e hizo que éstas eligieran sus gobiernos
En tal sentido, cuando Mansilla fue nombrado Gobernador de Entre Ríos en el año 1821, se propuso y lo logró, que los territorios de Corrientes (Taragüí Tetãminí en guaraní)  y Misiones, dependientes de Entre Ríos, fueran erigidos en provincias que elegían a sus propios gobernadores, haciendo que estas  provincias eligieran ellas mismas sus gobernantes.
En efecto, hasta entonces dichas territorios lo eran dependientes de Entre Ríos. Gracias a Mansilla, fueron convertidas en provincias soberanas. Mansilla ordenó a don Evaristo Carriego y a don Félix de Aguirre, a la sazón comandantes militares de dichas zonas, que convocasen los vecinos para que eligieran con total autonomía un gobierno que rigiese los destinos de Corrientes, tal como se hizo.
Además, Mansilla hizo sancionar, en 1821, la primera constitución provincial para Entre Ríos, la cual él mismo había elaborado junto con Domingo de Oro y el doctor Pedro J. Agrelo. Al concluir su mandato, rehusó continuar en el cargo para no sentar precedentes, a pesar de haber sido reelecto tres veces. 
Del mismo modo, firmó con Buenos Aires, Corrientes y Santa Fe el “Tratado del Cuadrilátero” en la ciudad de Santa Fe el 22 de Enero de 1822; él fue su principal gestor. Su artículo 3, daba a las provincias contratantes de Corrientes, Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires el goce pacífico de los territorios que poseían. Con respecto a Misiones (artículo 15) se la declara libre para darse un Gobierno y para reclamar la protección de cualquiera de las provincias contratantes.
(Pero debieron transcurrir muchos años para que Misiones se escindiera de la Provincia de Corrientes y se erigiera en Provincia. Recién el 10 de Diciembre de 1881se sancionó -y el 22 de diciembre se promulgó- la ley por la cual se federalizó Misiones, separándola de la Provincia de Corrientes, creándose el Territorio Nacional de Misiones).
Volviendo al General Lucio N. Mansilla, éste fue ascendido al grado de general del Ejército Argentino y en 1826 y participó activamente en la guerra contra el Imperio del Brasil, en varias batallas –entre ellas- la batalla de Ituzaingó (llamada entonces ‘Cutizaingó’). Fue distinguido con el uso de un escudo y cordones de oro, siendo después nombrado "Jefe de Estado Mayor" hasta la retirada del ejército a cuarteles de invierno en 1827.
De vuelta en Buenos Aires, se casó en 2das nupcias con  Agustina Ortiz de Rozas​ hermana menor de Juan Manuel de Rosas.
Como dijimos en “Brig. Gral. JUAN MANUEL DE ROSAS  (Aspectos Poco Conocidos De Su Vida Y Su Familia)
(elmensajerodelaconfederacionargentina.blogspot.com –Ed. Febrero 2019)
“Lucio N. Mansilla, hombre inteligente y con luces no solo militares sino políticas y sociales, en el año 1834 siendo Jefe de la Policía de la ciudad creó y reglamentó el Instituto de ‘Serenos’ que dio inicio a las luminarias de las calles de Buenos Aires, y estuvo vigente durante muchos años hasta entrado el siglo XX. Este sistema fue luego copiado en Brasil y Uruguay”
En cumplimiento de un decreto emitido el año anterior por el gobernador BALCARCE, como Jefe de Policía creó y organizó la fuerza policial, modernizándola. Y entre tales tareas fundó la institución de Serenos redactando sus reglamentos. Ésta entró en funciones el 13 de Marzo de 1834. El 3 de Junio de 1834 entró en funciones un grupo de vigilantes del mismo tenor pero para el patrullaje durante el día Tal éxito tuvo que vinieron del Brasil y de la Banda Oriental para copiar el modelo y crearlos en sus países.
Hagamos un poco de historia de cómo Mansilla terminó siendo quien da forma a este cuerpo llamados vulgarmente “SERENOS”, tal como lo relata el sitio “El Arcón de la Historia Argentina” (http://elarcondelahistoria.com/serenos-1834/).
“Así se llamaba popularmente a los integrantes del “Cuerpo de Vigilante de Noche”, creado el 3 de junio de 1834. Eran los guardianes encargados de rondar de noche por las ciudades durante la segunda mitad del siglo XIX. El nombre deriva de la costumbre que tenían, de ir anunciando la hora y el tiempo durante toda la noche, gritando: «las doce y sereno» o «lluvioso». En la época colonial había ciudadanos o soldados dirigidos por el Alcalde, que velaban por la seguridad nocturna y ya en 1805 el Cabildo de Buenos Aires quiso establecer un servicio regular de serenos pero no tuvo éxito. En 1815 hizo un segundo intento, que también fracaso
En 1821, el diputado de policía JOAQUÍN DE ACHÁVAL decidió probar por tercera vez y tampoco pudo ponerse en práctica el servicio que ya le era imprescindible a la ciudad de Buenos Aires, dado el incremento que había sufrido su población. En 1833, el gobernador BALCARCE volvió a proponer el proyecto y al año siguiente, el general LUCIO NORBERTO MANSILLA, jefe de la Policía de Buenos Aires, simultáneamente con la creación del cuerpo de «Vigilantes de Día de la Ciudad» (3 de junio de 1834), creó el “Cuerpo de Serenos” (o “Vigilantes de Noche), policía nocturna que entró en servicio el 13 de marzo de 1834, y se relevaba con los “Vigilantes de Día», alternando con ellos su presencia en las calles de la ciudad de Buenos Aires.
Estaba formado por catorce hombres que patrullaban treinta y tres cuadras del centro de la ciudad y no eran en realidad un cuerpo oficial de policía, pues si bien dependía funcionalmente del Jefe de esa Repartición, eran costeados por los vecinos, que abonaban al efecto, un llamado “Impuesto de Serenos”, que era administrado por una Comisión Directiva, a la que también se hallaban subordinados. Sus obligaciones eran, además de las de vigilancia, la de despertar a los vecinos que se lo solicitasen, controlar que las puertas de las casas y comercios estuvieran bien cerradas (llamaban a los propietarios en caso de no estar así), atender las emergencias de los pobladores, por ejemplo, llamar al médico o al sacerdote, volver a encender los faroles o luces que se habían apagado accidentalmente, mantener el orden y velar por el cumplimiento de la ley. Cada 30 minutos debían cantar la hora y el tiempo, con el agregado del consabido lema político durante la época de ROSAS (“Las doce han dado y sereno, viva la santa Federación” era el latiguillo usado). Actuaban provistos de un farol para alumbrarse y hacer señales, una lanza corta y pistola para defenderse, y un capote con caperuza para protegerse de las inclemencias del tiempo. Fuera de lo nombrado, que era lo que los uniformaba, en lo demás, vestían a su arbitrio y fue frecuente verlos con sombrero gris de copa alta, pañuelo al cuello, con el obligado cintillo federal en el pecho, rojo, calzoncillo cribado blanco y pesados botines negros.
En 1840 comenzaron a vestir uniforme, al igual que las fuerzas policiales y como ellas militarizados. Con el crecimiento de la ciudad, este Cuerpo se hizo cada vez más numeroso y durante el gobierno de ROSAS, se involucró tanto con el gobierno, que se disolvió después de la caída del caudillo. En 1852, casi inmediatamente después de Caseros, el cuerpo de “Serenos” o “Vigilantes de Noche”, fue reorganizado. Recuperaron su estado civil, pero ahora patrullaban las calles a caballo y en 1854, pasaron a depender de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires
Este pintoresco organismo, cuyos integrantes dieron una nota característica a la vida nocturna de Buenos Aires, desapareció junto con los «Vigilantes de Día», al ser sustituidos  ambos, por el «Cuerpo de Vigilantes» y sus funciones pasaron a ser responsabilidad de la Policía. Los “serenos” prestaron su último servicio en la ciudad de Buenos Aires durante la noche del 30 de noviembre de 1872, pero hasta 1883 continuaron prestándolo en la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe”
Además, digamos, que Mansilla hizo varias obras públicas como la creación del camino al Riachuelo en la Boca y su muelle
Iniciada la Guerra entre la Confederación Argentina y la Confederación Perú-Boliviana en 1837, Mansilla deja su cargo al frente de la policía de la ciudad para ocupar el de Jefe del ejército de reserva en la Provincia de Tucumán y organizarlo en consecuencia.
Entre 1840 y 1844 se desempeñó como legislador provincial. A su vez, desde 1839 en adelante fue jefe del ejército de reserva de la ciudad, cargo que ocupó por varios períodos, alternando con la comandancia de la costa del río Paraná hasta el final del gobierno de Rosas.
El hecho más destacado que le cupo protagonizar a Lucio Norberto Mansilla fue conducir como Jefe del Departamento del Norte a las tropas argentinas que enfrentaron a la flota anglo-francesa, en la batalla de la Vuelta de Obligado EL 20 de Noviembre de 1845,, llamada hoy la Batalla de la Soberanía, y en las llamadas Quebracho y San Lorenzo el 4 de junio de 1846.
No empuñó más las armas hasta el año 1852, cuando el gobernador de la provincia de Buenos Aires, su cuñado Rosas, lo nombró Comandante de las fuerzas de la ciudad de Buenos Aires — la reserva del ejército, es decir, los inválidos y los extranjeros que prestaban servicios en las milicias urbanas — mientras Rosas  enfrentaba al Imperio del Brasil que se alió con el traidor Justo José de Urquiza que se había levantado en armas y sus aliados unitarios, "colorados" uruguayos y brasileños.
Caído el gobierno de Rosas, luego de la batalla de Caseros, licenció a sus tropas, entregó el fuerte al enviado de Urquiza y se embarcó en el mismo barco inglés que Rosas. A diferencia de éste, se estableció en Francia, donde residió muchos años. Napoleón III y su corte imperial, lo recibieron con honores y le concedieron un trato preferencial, pese a haber sido su enemigo, por considerar que había defendido a su patria de la invasión extranjera. Incluso medió en el casamiento de Napoleón III y su esposa española, María Eugenia de Montijo. Fue tal la impresión que dejó este  viejo General argentino en la corte Imperial, que en 1868 Napoleón III renombró una calle de París como Rue d' Obligado (Rue d' Argentine a partir de 1948), en reconocimiento a la heroica defensa de la soberanía Argentina realizada por Mansilla y sus hombres en la Batalla de la Vuelta de Obligado.
Luego de algunos años vuelva a Buenos Aires hasta su muerte por la llamada ‘Fiebre Amarilla’ que azotó la ciudad, el día  10 de abril de 1871, a los 79 años.

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Fuentes Consultadas
www.lagazeta.com.ar (La Gazeta Federal)
Roberto Colimodio (‘ El Verdadero Héroe de la Vuelta de Obligado: Lucio Norberto Mansilla -’ diario LOS ANDES- Martes  20-11-18)
“El Arcón de la Historia Argentina” (http://elarcondelahistoria.com/serenos-1834/).
Adolfo Saldías (‘Historia De La Confederación Argentina: Rozas y Su Época’ Ediciones Clio-1973-3 tomos)
Gonzalo V. Montoro Gil (“Brig. Gral. JUAN MANUEL DE ROSAS-Aspectos Poco Conocidos De Su Vida Y Su Familia)” (elmensajerodelaconfederacionargentina.blogspot.com –Ed. Febrero 2019)